Aitor Kimera
Rumba y tinta… Solo puede salir bien
Un poco sobre mi
Empecé a tatuar allá por el año 1900… ¡Ja! Empecé en 2004 en un pequeño estudio de Barcelona. Tuve mucha suerte porque tuvo mucho que ver la casualidad. Siempre había querido ser dibujante de cómics y de dibujos animados desde pequeño, porque siempre me habían flipado los dibujos. Por diferentes razones no fui por ahí, tiré por el sector de la metalurgia y me hice soldador, aunque también trabajé en un montón de tiendas. En 2004, haciéndome un tatuaje en el brazo con un auténtico maestro jedai del tattoo, tuve la suerte de que me propuso aprender con él y ahí empezó mi aventura.
Me he especializado en todo aquello que me gusta y apasiona: el mundo friki, el cómic, series y películas de animación, el cartoon, las caricaturas… Me encanta el color, el buen rollo, que seamos personas alegres y amables. Siempre quiero que mis clientes se queden con un buen recuerdo del tatuaje. Es un mundo que me encanta, amo el mundo de tattoo. Disfruto como un enano diseñando y dibujando modelos únicos y exclusivos para la gente, dibujos que no se vuelvan a repetir nunca más. ¡Soy un tío y un tatuador sencillo!